Los astrónomos de Suecia lograron encontrar una explicación para un misterio reciente en el centro de la Vía Láctea: los altos niveles de escandio vistos la primavera pasada cerca de un agujero negro gigante de la galaxia que resultó ser solo una ilusión óptica.
La primavera pasada, los investigadores informaron la presencia aparente de niveles sorprendentes y dramáticamente altos de tres elementos diferentes en estrellas gigantes rojas que están a 3 años luz del agujero negro central. Se presentaron varias explicaciones posibles: el resultado de la destrucción de estrellas tempranas que cayeron en un agujero negro, o fragmentos de la colisión de estrellas de neutrones.
El nuevo análisis nos permitió encontrar una explicación más lógica y simple para los altos niveles de escandio, vanadio e itrio. Resulta que las líneas espectrales presentadas en primavera se convirtieron en una ilusión óptica. Las líneas espectrales se utilizan para averiguar la composición química de una estrella, centrándose en su luz. Estos gigantes han agotado la mayor parte del combustible de hidrógeno, por lo que la temperatura alcanza solo la mitad del sol.
Resulta que los índices de temperatura más baja de las estrellas ayudaron a crear la ilusión óptica que se produce al medir líneas espectrales. En particular, esto significa que los electrones en los elementos se comportan de manera diferente a diferentes temperaturas, lo que también puede ser engañoso en el cálculo de las líneas espectrales en las estrellas. Se utilizó un telescopio Keck en Mauna Kea (Hawai) para el análisis. Se está llevando a cabo un mapeo completo de las regiones centrales de la Vía Láctea, explorando líneas espectrales a la luz de varias estrellas para descubrir su composición. El objetivo es tener una idea de los eventos que tuvieron lugar en la Vía Láctea y comprender el proceso del nacimiento de las galaxias.
Las líneas espectrales de cada elemento se registran en un espectrómetro de alta resolución, una cámara avanzada que genera un arco iris de luz estelar. Los investigadores estudiaron parte del espectro de la radiación del infrarrojo cercano: los rayos térmicos de las estrellas. La luz IR es capaz de penetrar en el polvo, interfiriendo con la línea de visión del centro de la Vía Láctea, que se encuentra a 25,000 años luz de distancia. El análisis a gran escala acaba de comenzar, por lo tanto, en un futuro cercano, estamos esperando un resultado exacto.
