Los científicos estaban muy emocionados cuando, observando con la ayuda del Telescopio Espacial Hubble, notaron un exoplaneta HD 209454b, cuyo tamaño es comparable al tamaño de Júpiter, que pasó frente a su estrella madre en relación con la línea de observación del observatorio.
Pero lo que descubrieron, estaban muy desconcertados: un extraño y asimétrico patrón de átomos de hidrógeno altamente cargados, que se movía bastante rápido de la estrella.
Con la ayuda de un nuevo modelo de computadora tridimensional, parecen haber encontrado una explicación razonable. Un modelo que toma en cuenta todas las interacciones conocidas entre los vientos estelares y la atmósfera de los planetas indica que el planeta literalmente se "baña" en vientos estelares que alcanzan las 249 millas por segundo. El modelo también mostró que el campo magnético del planeta en ese momento era un 10% más poderoso que el de Júpiter. Se espera que el nuevo modelo se convierta en una herramienta útil para evaluar cómo los planetas fuera del sistema solar interactúan con sus estrellas progenitoras.
