Visión artística del sistema planetario.
Un nuevo estudio muestra que las condiciones en mundos completamente cubiertos de agua son mucho más amigables de lo que se pensaba anteriormente. Esto abre la posibilidad de que tales planetas puedan ser habitables.
La comunidad científica creía que los planetas completamente cubiertos con agua no son capaces de mantener la naturaleza cíclica de los minerales y gases, debido a que el clima en la Tierra se conserva, lo que significa que no hay opciones para la vida. Pero ahora los científicos creen que los planetas oceánicos ofrecen muchas más oportunidades de lo que se pensaba anteriormente. Esta teoría se basa en más de mil simulaciones.
En este caso, ya no necesitamos buscar el clon de la Tierra y sus características. A medida que los telescopios mejoran, los investigadores encuentran cada vez más planetas que giran en torno a estrellas distantes alienígenas. Tales descubrimientos apuntan a la posibilidad de que la vida pueda sobrevivir en otros mundos que son muy diferentes de la Tierra. Además, en algunos no hay tierra en absoluto, y el agua tiene una profundidad de cientos de millas.
La vida necesita un largo período de desarrollo, y el nivel de calor cambia a medida que la estrella envejece, por lo que los científicos buscan planetas con agua y una forma de mantener el clima estable. El único método que conocemos es el de la Tierra, donde el planeta ha estado enfriándose durante mucho tiempo, arrastrando los gases de efecto invernadero a minerales y calentándolos, liberándolos a través de los volcanes. Pero este modelo no funciona en un mundo completamente cubierto de agua, por lo que los investigadores decidieron buscar otras formas. Crearon una simulación con miles de planetas formados al azar y rastrearon la evolución del clima a lo largo de miles de millones de años. Resultó que muchos de ellos permanecían estables, al menos los datos precisos se referían al 10%.
Estos afortunados planetas están ubicados en los lugares correctos alrededor de sus estrellas nativas. También tienen la cantidad necesaria de carbono, no un volumen tan grande de minerales y elementos de la corteza disuelta en los océanos, lo que eliminaría el carbono de la atmósfera. Inicialmente, tienen un volumen de agua suficiente y el carbono circula solo entre la capa atmosférica y el océano, lo que, en las concentraciones adecuadas, ayudará a mantener un proceso estable.
La simulación tuvo en cuenta estrellas similares al Sol, pero los resultados siguen siendo optimistas para las enanas rojas. Los planetas en tales sistemas se consideran candidatos prometedores para el desarrollo de la vida, porque las estrellas se vuelven mucho más brillantes con el transcurso del tiempo.
